jueves, 25 de marzo de 2010

Jet lag ... de vuelta de las americas.


Vengo un poco revuelta, demasiados cambios, demasiadas emociones, demasiadas risas,... he vivido una experiencia muy bonita. He descubuerto un país al que creía conocer, he visto las imágenes que ya había visto por televisión. Me soreprende reconocer que es todo tan real, los autobuses del colegio amarillos, las casas del lago, las canastas sobre la puerta del garaje, los buzones con su forma característica, las carreteras con rectas interminables, los miles y miles de Mc Donald's y los tropecientos mil Starbucks, las familias obesas comiendo hamburguesas, las animadoras rubias de curvas imposibles, los trailers gigantes, las camionetas, los coches familiares tipo color madera, que cada ciudad tiene su bronx, los restaurantes típicos donde la camarera te rellena el café, las gasolineras donde compras cerveza a media noche, manifestaciones de 4 personas con letreros andando en círculo, iglesias de todo tipo y religión por todos los sitios, llanuras que no tienen fin, como sus campos de maíz, caminos en los que preferirias no perderte porque seguro que no te arranca el coche y acaban muriendo todos menos uno. Toda una seria de cosas que te hacía pensar que ya habías estado allí. Chicago es una ciudad muy europeizada, había muchas cosas que me recordaban a Londres, puede que por la influencia de haber vivido allí pero la verdad que me recorrí el centro de punta a punta a pie, pasear por el lago Michigan congelado fue una pasada, ver sus gigante construcciones es increible, esto es algo que la capital inglesa no tiene, megarascacielos. Lo especial de Chicago es que su arquitectura es impactante, me quedaba embelesada mirando sus fachadas, tan características, es lo que más me ha gustado, disfrutar de su paisaje arquitectónico. Otra cosa que he descubierto es que ir a ver un partido de la NBA no es cualquier cosa, es todo un espectáculo en mayúsculas y me convertí en una fan más de los Bucks, además es accesible a todo el mundo ya que la entrada solo costó 15 dolares y no estaba en mal lugar, no como nuestro queridísimo fútbol.
Ahora de vuelta a la rutina, aunque extrañamente tocada del estomago.

A reveure.

2 comentarios:

guitarboy dijo...

... lo imaginaba conforme lo contabas.. me alegra que estés de vuelta..

dEsoRdeN dijo...

Viajar es lo más mejor de este mundo!

;P